Si se encuentra en la búsqueda de la mejor solución para crear o renovar la flotilla vehicular de su empresa, y necesita mayor claridad sobre lo que implica el leasing y cuáles son sus diferencias con respecto al renting, entonces está en el lugar correcto.
Al terminar esta nota, tendrá mayor claridad sobre qué aspectos caracterizan al leasing, a fin de que los valore y le sirva como una pauta para pensar qué le conviene más. En este punto, para tener un análisis más completo, también es oportuno que lea sobre las ventajas y desventajas del leasing; y, sobre todo, identificar cuándo es rentable para su empresa.
5 Claves que diferencian al leasing del renting
1. Los requisitos
Aunque parezca obvio, es un apartado que definitivamente no puede pasar por alto. Al final del día, el leasing es prácticamente un crédito y son las entidades financieras quienes lo ofrecen. Por eso, estos créditos suelen variar según el banco al que solicite esta alternativa.
Con el leasing no siempre sabrá de manera estándar cuáles son los requisitos. Generalmente son demasiados y variados porque los bancos necesitan saber si el riesgo vale la pena. Acá puede resultarle útil conocer cómo funciona el leasing en Costa Rica: un contenido que aborda los requisitos de 3 bancos, a fin de que tenga una idea más clara sobre este punto.
En el caso del renting, los requisitos suelen ser menos. Si lo piensa bien, puede ser beneficioso si busca adquirir sus vehículos lo antes posible.
2. El servicio
Por lo general, el leasing es menos personal. Quizá esta diferencia no sea tan relevante para usted o ¿quizás sí lo sea? En leasing no hay mayor interés que asegurar que su empresa tenga la capacidad de pago y cerrar el trato. En cambio, en el renting está la posibilidad de que un ejecutivo le de seguimiento, a fin de asesorarle sobre cuál vehículo puede resultarle más provechoso para solventar las necesidades que su empresa tiene.
Es muy probable que aprecie esta posibilidad de acompañamiento, principalmente si busca tranquilidad y seguridad. Si lo piensa detenidamente, es una opción muy provechosa, ya que tendría la asesoría de una persona especializada. De esta forma, evitará hacerse con vehículos guiándose únicamente por la marca, sino también por la utilidad para su empresa.
3. Las consecuencias por morosidad o deudas
Quizá sea algo que no se mencione mucho, pero también resulta lógico. Al final de cuentas, el leasing funciona como un crédito, por lo que en caso de atrasarse con el pago de las mensualidades, las amortizaciones y los intereses, es probable que su récord crediticio se vea afectado y por ende, su empresa tenga dificultades para adquirir préstamos.
En tanto, el renting es un alquiler, por lo que si en dado momento decide prescindir de este servicio, no tendrá mayores consecuencias con respecto a la capacidad de su empresa de solicitar crédito.
4. La opción de compra
Una de las diferencias más reconocidas sobre el modelo leasing es que esta alternativa otorga a la empresa arrendataria la posibilidad de comprar al final del contrato. Cabe destacar que también está la opción de no hacer valer esta opción, aunque en la mayoría de los casos se suele llevar a cabo.
Por supuesto, en el renting no se incluye la opción de compra alguna, pero sí la oportunidad de renovar el contrato.
Aunque esta parece ser la clave por la que muchas empresas se inclinan por el leasing, es importante que no solo se quede con esta idea general, sino que valore todo los pormenores que implica, como por ejemplo, la obsolescencia del vehículo. ¿Valdrá la pena quedarse con un vehículo que con el pasar del tiempo requiera de mayor inversión en mantenimientos?
Por eso, es recomendable que no solo se fije en las características, sino que valore las necesidades de su empresa. De hecho, para ayudarle en este apartado, hemos preparado un contenido que le ayudará a determinar cuándo es buena opción optar por el leasing empresarial.
5. Los gastos de mantenimiento
Probablemente sea la segunda diferencia más conocida entre el leasing y el renting, y es que las cuotas que pagan por el renting incluyen los gastos de mantenimientos correctivos y preventivos, por lo que significa un gran apoyo a las finanzas de su empresa. Prácticamente no deberá preocuparse por el estado de los vehículos.
En tanto, en los pagos mensuales del leasing no está incluido ningún tipo de gasto referente al bien. A pesar de que legalmente su empresa no es la propietaria de los vehículos, deberá hacerse cargo de todos los gastos relacionados.
En fin, esperamos que este contenido le ayude a tomar la decisión que más le convenga a su empresa. Sin embargo, lo leído en este artículo es apenas el principio. Para decantarse por el leasing o desestimarlo, es importante que conozca todo los detalles referente a este modelo. Por eso, le invitamos a que lea nuestro contenido sobre todo lo que debe saber sobre el leasing en Costa Rica.
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